Se nos fue y daba gusto ver la seguridad con la que llevaba la interpretación de las composiciones. Era y es un placer oírlo tocar.
Paco de Lucía no solamente fue un gran ejemplo a nivel musical, también lo fue como persona. La naturalidad con la que vivía, el no querer participar nunca de ninguna clase de star-system, el estar rodeado siempre de gente como él, su integridad total y absoluta. Lo he escuchado fallar mil notas pero nunca lo vi dar un paso en falso. Impecable, siempre.
No vamos a decir nada más. Solo vamos a disfrutar con su música. Gracias por todo.
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